¿Alguna vez os habeís preguntado que son los vinos biodinámicos?
Saludos a todos los que nos leéis cada vez que compartimos alguna información de interés en el amplio mundo del vino. En esta ocasión hablaremos de un tema que está muy sonado en las mesas de los que siempre están dispuestos a compartir una buena charla y si es en compañía de una buena copa de vino mucho mejor.
Los vinos biodinámicos están en boca de todos. Cada vez es más frecuente ver en la etiqueta o la descripción del vino la palabra biodinámico, pero realmente hay confusión sobre qué son exactamente y en qué se diferencian de los vinos naturales o los vinos ecológicos. La viticultura biodinámica se considera uno de los desarrollos más positivos en las dos últimas décadas en el mundo de la viticultura.
El cultivo biodinámico requiere de más recursos y cuidados a la viña, por lo que es el producto final es más caro. Esto hace que para una parte de los consumidores sea más difícil acceder a estos vinos y por ende más difícil que la gran mayoría pruebe, note y valore las diferencias resultantes.
La agricultura biodinámica busca el equilibrio con el ecosistema, preservar la diversidad biológica y la recuperación de la actividad microbiana del suelo. Para ello, por supuesto no utilizan ningún tipo de fungicida o pesticida, ni químico alguno. La biodinámica lleva la agricultura ecológica un paso más allá, siguiendo el calendario lunar y astronómico (calendario biodinámico) como guía de los ciclos naturales y planta hierbas sanadoras en el viñedo, como valeriana, ortiga, diente de león o manzanilla. Y se fertiliza mediante compuestos biodinámicos, como compost en cuernos de vaca enterrados.
Puede que esto sea lo que más ha trascendido sobre la biodinámica, la existencia de unos preparados hechos con diversos elementos, todos de origen natural. La biodinámica asegura que los ciclos de la luna tienen influencia sobre la vida de las plantas. Esto no es un invento moderno, sino que vuelve la vista atrás a la agricultura tradicional. El calendario lunar no es lo único que tiene en cuenta el calendario biodinámico, creado hace más de 50 años por María Thun, también se tienen en cuenta los astros, los efectos cósmicos de estos sobre las plantas.
Las fases de la luna y su influencia en la elaboración de los vinos biodinámicos
Se basa en la relación entre las fuerzas cósmicas y el crecimiento de las plantas, así como la influencia de la luna y sus ciclos. Dada la influencia de la Luna y los planetas en los ritmos de la naturaleza hay 4 categorías a seguir:
- Días de fruta: son los mejores días para realizar la cosecha.
- Días de raíz: son estupendos para podar.
- Días de flor: no realizar trabajos en la planta para que esta pueda dar su fruto.
- Días de hoja: días apropiados para regar la vid.
Y sobre el consumo del vino, el calendario marca también días en las mismas categorías. Si queremos tenerlo en cuenta para catar, las reglas son las siguientes:
- Días de fruta: los mejores días para catar (la Luna se encuentra en un signo de fuego)
- Días de flor: más neutros para la apreciación de sabores (la Luna está en un signo de aire)
- Días de hoja: no es un buen día para catar, excepto ciertos vinos blancos (la Luna está en un signo de agua)
- Días de raíz: no es para nada un buen día para catar, las notas frutales se esfuman y se acentúan los taninos (la Luna está en un signo de tierra)
Como has podido leer, sin duda es muy variado el abanico de posibilidades que existen hoy en día sobre el fascinante mundo del vino; ya tomaremos la mejor decisión que más se adapte a nuestros gustos y por supuesto a nuestro presupuesto, mientras no queda más que seguir disfrutando de las bondades que nos proporciona este fantástico elixir de los dioses,
Salud!